El Devorador de historias parece una descomunal salamandra o reptil hecho de cintas de un color negro que absorbe el sol entretejidas por hilos purpúreos. Como si las cintas estuvieran parcialmente enrrolladas a un cuerpo que no existe. Las cintas cambian de posición y forma, representando que no es posible aprehender su completa exactitud con los sentidos. En ocasiones parece tener más de pájaro que de reptil. En sus cintas, como si fueran bovinas de película, guarda incontables cuentos e historias devorador que nunca volverán a saberse. Instinct: Devorar historias

• Deformar la realidad a su alrededor.
• Usar el Vacío a su antojo.
• Ha devorado mil historias

El dios del infierno es el padre de la novia y no está dispuesto a dejar que nadie deje a su hija plantada en el altar Instinct: Corromper

• Demostrar supremacia bruta
• Fuego del averno

Gusano que habita las arenas y aparece de la nada tragandose ciudades enteras... Instinct: Alimentarse

• Tragarse algo imposible

His desire for vengeance brought him back from the land of shadow. Instinct: Call for vengeance

• Tap into shadow magic
• Use Dead magic ray
• Desire of vengeance regenate him

Orestes, el Forjador Loco. Nació sin la habilidad requerida para crear eras y continentes tan perfecta como la del resto. Se dice que se exilió de Levaryck durante eones y, cuando volvió lo hizo completamente loco, habiendo modificado y reforjado su cuerpo de formas horrorosas. Se dice que tan retorcido era su nuevo ser, que necesitaba colgar bocabajo para poder existir. Desoyendo al resto de Forjadores, Orestes comenzó a crear su megápolis de pesadilla, sepultando al Océano Primordial del mundo y creando habitantes tan horrendos como él. Cobarde, maquinador e inteligente, tiene pleno control sobre Carcosa gracias a los rituales mágicos con los que imbuyó su creación. Se encuentra atrapado en un bucle temporal que él mismo creó para evitar la muerte. Es una enorme figura humanoide envuelta en harapos amarillentos que cuelga bocabajo de la cima de la Torre de las Híades. Tiene 4 pares de brazos contrahechos, alargados y elongados, y nadie puede imaginar las terribles deformidades que esconden sus andrajos y vendas. Instinct: Alzar Carcosa de nuevo

• El Rey Colgado de Carcosa
• Utilizar a su antojo la ciudad como parte de su cuerpo.
• Atrapado durante milenios en un bucle

Instinct: To gain the upper hand

• Pincers to the throat
• Tangle through their legs

Giant feathered serpents, soaring through the clouds. Fiercely protective of their territory, most easily avoided by travelling on the ground and keeping in the shelter of bushes and shrubs. They have an amicable relationship with the locals, who seem to be trying to gradually train and domesticate them. Instinct: To patrol and protect it's territory

• Swoop in and swirl back
• Shimmering plumage camouflage
• Emit a powerful rainbow flash from it's maw, dazzling and blinding

As large as the largest trees of Asgard. Skin like ironwood bark and a flame that could melt iron, indistinguishable from a mundane tree, aside from the large golden growths resembling apples that grow from their scales. While one is formidable in its own right, The Orchard where Idun rules contains numbers innumerable. Instinct: Defend immortality

• Burn those that would encroach on the orchard.
• Strike from the trees

Instinct: Summon Thing

These amorphous shapeshifters lurk in the odd corners of the world where they lure in prey by shifting into things of value. Once something reaches out and touches the mimic these creatures attack whatever is contacting it and consume it. Their skin is sticky holding those that touch them. Instinct: To consume

• Shapeshift into valuables
• Adhere and attack